Seguimos en el dia 21 (Aunque ya hace seis días del embotellado)
Pues si, esta publicación se ha hecho esperar un poco, pero seguro que en ella encontrareis detallitos que pueden ayudaros a haceros la vida «cervecera» más fácil.
Y por si no visteis la primera parte podéis verla haciendo clic aquí: Embotellando nuestra primera cerveza (I)
¡Seguir leyendo y veréis!
3.- Chapado de las botellas.
Nos quedamos con nuestra cerveza ya embotellada y con la cantidad de azúcar necesaria para terminar de fermentar y producir el gas carbónico que nos deja esa espuma que tanto nos gusta
Tal como dijimos, como el chapador «de golpe» no nos convencía, decidimos utilizar el otro… cogimos una de las botellas que habíamos estado guardando, limpiado y desinfectando. ¡Colocamos sobre la boca la chapa!…. (¡¡¡redoble de tambor!!!) ACCIONAMOS Y…
Y vemos que no cierra bien la chapa y que se escapa del cuello de la botella…
¡¿QUE PASA Y PORQUE NOS HACE ESTO?!
¿¿ESTARA ROTO EL CHAPADOR??
Vemos, revisamos, inspeccionamos y nos damos cuenta de un pequeño detalle de la botella que hemos estado guardando durante tantos días, la parte inferior del cuello es corta y como una imagen vale más que mil palabras podéis ver a que me refiero en estas:
Al ser más corta, el chapador no agarra bien en la parte inferior y no aprieta lo suficiente. Asi que aquí puedo dejar un nuevo consejo:
NOTA: A LA HORA DE ELEGIR LAS BOTELLAS QUE VAYAIS A EMPLEAR PARA VUESTRA CERVEZA BUSCADLAS CON EL CUELLO LARGO, QUE SON LAS QUE NORMALMENTE SE COMERCIALIZAN PARA ESTE MENESTER,Y OS EVITAREIS PROBLEMAS.
Algo de este tipo que, como digo, es la que normalmente se comercializa (Esta es de 33 cl.)
También tener en cuenta que que las chapas sean de 26 mm. para este tipo de botella.
Y un consejo extra: Comprad el mejor chapador que podáis permitiros… ¡y nunca uno de los de martillazo!
¡PORQUE ESTO DE AQUI ABAJO ES LO QUE NOS PASO!
Continuamos:
Viendo que no podíamos utilizar el chapador de tenaza decidimos, con mas dudas que menos, utilizar el de golpe…
Chapamos una…
Chapamos dos…
Y A LA TERCERA… ¡YA PODEIS VER EL RESULTADO!
¡¡Botella rota y un tercio perdido!!
Visto lo visto, no nos quedaba más remedio que utilizar el otro si no queríamos arriesgarnos a romper más.
Optamos por ajustar lo máximo, colocándolo con mucho cuidado y girando a diferentes posiciones hasta que la chapa quedase en su sitio de forma correcta.
Y por fin conseguimos terminar con la odisea y este es el fruto de todo este trabajo, de sufrimiento pero, hasta el momento de degustarlo muy satisfactorio por todo lo que hemos aprendido es ente camino.
En total han salido finalmente unos 4 litros de cerveza que, ahora mismo, tenemos ya 6 días reposando en un lugar controlado y con poca luz a la espera del momento deseado. 😉
Y este es el resultado que quedó en el fondo del tanque de fermentación…
En algunos casos dicen que se puede reutilizar para otras producciones, pero, nosotros de momento, optamos por desecharlo.
En nuestra próxima entrada haremos un resumen de este «cuaderno de bitácora cervecero» y lo fijaremos en la parte superior del blog para que podías/podamos consultar en todo momento esos pequeños (o grandes) fallos que nos han llevado hasta este punto y, en breve esperamos hacer la degustación de nuestra primera cerveza que os contaremos (tal vez nos animemos y hasta gravemos un video del momento estelar.
Hasta entonces:
SALUD Y BIRRAS
2 replies to "Embotellando nuestra primera cerveza (II)"
Ya se ven deliciosas!!! Éxitos!!!
Esperemos que sea así Ricardo. Como ya sabes esta primera ha sido muy experimental. 🙂